Con el chorro de luz y diagonal que necesitan en los cines comerciales, de muy muy muy alta calidad deben ser los proyectores para que respeten el contraste de puro cine. Allí penalizan mucho la calidad de imagen. Se habla de "cine" pero por la inmersión que te produce su interminable pantalla, pero a calidad real penalizan mucho, salvo los Hi-End que equipan Christie o Barco y similares.