Reconozco que soy un vinilófilo . Pero no por las portadas o el arte de limpiar los discos (que salvo pasarle y a veces el cepillito nunca lo hago) o cualquier parafernalia al respecto . Soy vinilófilo porque en general me suena mejor que el Cd pese a sus cracks y huevos fritos . Nada más que por eso .
Dicho lo anterior, tengo que decir que lo que pasa es que nunca se fue del todo . El año pasado, creo que fue, la sección de estampación de vinilos de la que creo que era la única planta que quedaba en España, se vendió (me refiero a Tecnodisco, de donde veréis que muchos CDs y DVDs comerciales se estampan ahí ). La razón es que era una división no rentable por poca producción y se ha vendido, creo, a un aempresa del este de Europa .
Lo que ocurre es que hay un nicho de mercado vinilero que supone una cuota de mercado de alto valor añadido porque los vinilos nuevos suelen ser de muy alta calidad y muy caros . Satisfacer esa demanda es un pequeño pero jugoso negocio como para dejarlo escapar . Pero hay que amortizar la matriz (el molde de estampación) entre pocas unidades vendidas y ahí el tema va jodido en precio porque sale más rentable un CD.
En conclusión, no creo que vuelva como soporte estándar . Sí que es posible que ese nicho crezca un poco, pero no demasiado, la verdad . Por lo menos, eso es lo que yo creo .