Que a uno le satisfaga perfectamente sus necesidades es comprensible, pero eso de que un sistema muy barato puede ser mejor que uno muy caro no es aceptable.
Por supuesto, nada es lineal y uno pueden encontrar que equipos más caros resultan mejor, pero dentro siempre de diferencias de precio razonables o cuando éstos ya están tan pasados por arriba que, más que diferencias de calidad, ya atienden a otro tipo de condicionantes (marca, prestigio, estética, etc.).
Creo que todo es más sencillo si, en lugar de analizar sonido analizamos imagen.
Es evidente que un televisor pequeño, o incluso uno antiguo varían muchísimo en la calidad que pueden ofrecer si están bien sintonizados o si no lo están. Una buena antena puede hacer por la imagen mucho más que la propia televisión. El perfecto ajuste de color, brillo, contraste, balance de blancos, etc., puede mejorar una imagen hasta extremos asombrosos.
pero una televisión nunca podrá dar más calidad de la que sus componentes le permiten. Si tiene una resolución máxima de pantalla de 480, nunca podrá dar una imagen tan nítida como una de 1080 o una 4K.
Otra cosa es que me digas que estás comparando una televisión pequeña y antigua pero perfectamente sintonizada para que ofrezca lo máximo de su potencial y una televisión 4k de última generación con un cable que apenas hace contacto y fatalmente ajustada, de forma que el brillo está al máximo y el color pálido. Puede darse el caso de que, incluso, la primera ofrezca una imagen más adecuada que la segunda.
Pues en sonido es igual. Los altavoces es la parte fundamental de un equipo y los altavoces tienen unas limitaciones físicas que vienen determinadas por su tamaño, tipo de driver, materiales empleados, peso del imán, filtros, etc., lo que se traduce no sólo en parámetros como la sensibilidad o el rango de frecuencias que admite (valores que dicen poco sobre la calidad de un altavoz) sino en la separación de sonidos que permite, en la capacidad para transmitir armónicos, en el tiempo que queda vibrando una membrana ante el ataque de notas graves.. Elementos que son inmodificables, por mucho que manejes aspectos de ecualización o de sala.
Estos pueden ayudar enormemente a mejorar el sonido, pero solo hasta el límite que tus altavoces puedan ofrecer.
Lo mismo ocurre con los amplificadores y con los reproductores (aunque en menor medida).
Y eso es así, al menos, hasta cierto nivel, cuando ya las diferencias son tan pequeñas que resultan inapreciables ciertamente.
Pero este nivel puedo asegurar que no está en "cualquier equipo" sino en una gama algo más elevada. Que me digas que no se puede establecer diferencia significativa entre un amplificador de 2.000 euros y otro de 5.000 lo puedo aceptar o, incluso, que funcione mejor el primero, según que parámetros, pero no puedo aceptar que un amplificador de 200 euros de mejor resultado que uno de 2.000.
Si lo da es porque las condiciones en las que se escucha y los ajustes realizados en el más caro no son buenos