Normalmente no hay problema en atacar los altavoces con un amplificador que dé más potencia de la recomendada. El problema viene cuando la potencia es inferior. Me explico.

En primer lugar, rara vez los fabricantes de la mayoría de las marcas de consumo masivo dan unos valores de potencia realmente fiables. La potencia RMS (raíz cuadrada de la media del cuadrado de la potencia máxima durante 10 minutos seguidos) era hasta hace unos años la medida estándar, pero hoy aparecen un montón de medidas no estandar que no hacen sino confundir. No es raro que aparatos que consumen 400 W anuncien una potencia nominal total superior a 1000. En realidad es posible que entreguen picos de potencia que ronden esa cifra pero en momentos tan pequeños que resulta difícil pensar que puedan dañar los altavoces.

Por otra parte, salvo que se use el equipo para fiestas, rara vez lo escuchamos a tope de potencia, más bien diría que casi nunca.

Y ahora, la paradoja. Si alimentamos unas cajas con un ampli que no pueda con ellas, tenderemos a subir más y más el potenciómetro de volumen, forzando el amplificador por encima de su nivel óptimo, empezará a "clippear" y distorsionar y su malfuncionamiento sí puede dañar la integridad de las cajas.


Saludos.