Bien, os cuento.

Hasta donde yo sé (y cuento con la información del que fue el director de fábrica de una de las plantas más importantes que hubo en España de esto), el grosor NO INFLUYE en el registro sonoro del disco : no influye nada en absoluto, el surco es exactamente el mismo, sea de 100 gr o 180 gr.

¿Entonces?¿es un timo? No, o no necesariamente, por varias razones y aunque hayan más, expongo tres a mi juicio las más importantes :

1.- Lo que más influye es la calidad del material a la hora de estampar, algo lógico, primero, a la hora de estampar, un buen material tiene mejores características en cuanto a temperatura (cerca de los 200 grados), presión, etc, de forma que la calidad de la estampación (inyección de plástico) es mucho mejor, más uniforme, menor alabeo y con un mínimo de errores, digamos, más fiel al molde, lo que a la postre, significa un surco mejor y más fácil de leer.

2.- En segundo lugar, mayor resistencia al desgaste por rozamiento y como un cierto poder lubricante que permite un mejor deslizamiento de la aguja.

3.- En tercer lugar, la estática :Supongo, que todos habréis tenido vinilos que según los sacas de la funda, se adhiere a él como moscas el polvo, mientras que en otros, eso no pasa o no pasa tanto.

Entonces, en las ediciones especiales de discos de 180 gr, más que el grosos en sí, es que se suelen cumplir las cosas que he mencionado antes.

También es verdad que si un disco tiene más grosor, digamos que hay más posibilidades de que se absorban por parte del disco algunas variaciones externas como vibraciones y que haya más par de giro, pero en un buen plato, yo tengo mis dudas de que eso en realidad suponga una mejora audible (no lo descarto, pero yo, personalmente, lo dudo).

Mi conclusión al respecto, es que esas ediciones suelen llevar más mimo o cuidado en los procesos y en los mateiales, pero como la mezcla no sea buena, vamos jodidos sea cual fuere el formato a escuchar.