Discrepo.
Los tiros no van por ahí. Se ha escrito mucho sobre este tema (en el subforo de amplis tienes un hilo reflotado recientemente de amplis estéreo vs AVRs), y al final la conclusión es que la diferencia puede notarse, o no, dependiendo de varios factores, que intentare resumir.
La función de un amplificador del tipo que sea es amplificar (de perogrullo) la señal de entrada y enviarla a los bafles con suficiente potencia como para que estos den la presión sonora ("volumen") deseada, y además, debe ser capaz de suministrar los picos de potencia (de corriente) que sean necesarios con la agilidad suficiente. Si un ampli falla en una de estas dos cosas, el sonido hará aguas.
¿Y de que depende que el ampli de la talla o no? Pues de lo que se le exija, fundamentalmente dependiendo de la música que escuches y de los altavoces.
Por lo que se refiere a los altavoces, estos tienen dos parámetros muy importantes en este sentido, como son su impedancia y su sensibilidad. Cuanto menor sea la impedancia, más corriente pueden necesitar (depende de la frecuencia), es decir, más cerca de su límite se hace trabajar al ampli. en cuanto a la sensibilidad, esta es básicamente el "volumen" que da un ampli para un mismo consumo eléctrico. Con altavoces de sensibilidad baja tendrás que subir más "el volumen" del ampli para tener la misma presión sonora ("el volumen" que oyes), es decir, harás trabajar al ampli más cerca de su límite.
Cabe aclarar que la impedancia y sensibilidad de unos altavoces no tienen nada que ver con su calidad, que se podria definir como la capacidad de sonar tan parecido a la grabación original como sea posible. Unos bafles pueden ser muy buenos, y tener una impedancia y sensibilidad muy bajas, lo que se traducirá en que para que esos bafles den su autentico nivel de calidad, deben estar amplificados por un muy buen ampli. Del mismo modo, unos bafles con impedancia y sensibilidad altas pueden sonar muy mal y eso no hay ampli en el mundo que lo arregle.
En cuanto a la música (bueno, o el sonido en general) que quieres reproducir, una canción con grandes variaciones en las frecuencias y en el volumen de la grabación será muy exigente para el ampli por lo que se refiere a su capacidad de "respuesta instantánea", la cual también dependerá de lo exigido que esté "de forma continua" en el momento en que se le pide el pico. Si los bafles tienen baja sensibilidad e impedancia, unl ampli que en general responda bien puede ir con la lengua fuera, y en cuanto le pides un esfuerzo puntual, ya no da para más.
Después de soltar todo este rollo, creo que se entenderá que eligiendo unos altavoces poco exigentes, no haga falta un gran ampli para conseguir un buen sonido.
Desde luego a igualdad de precio de catalogo, un AVR saldrá bastante más caro (del orden del doble) que un ampli estéreo para tener la misma capacidad como amplificador. Sin embargo, mientras el precio de los amplis estéreo es estable, los AVR caen casi a la mitad de precio en cuanto sale el modelo que les sustituye, así que si comparamos un ampli estéreo con un AVR descatalogado, los precios ya son muy similares, y la calidad también.
Parece ser que aun así los amplis estereo tienen comparativamente algo más de capacidad de entrega de puntas de corriente y de agilidad en la respuesta, pero esto no se va a notar mientras al ampli no se le pida más de la cuenta. Es decir, que mientras no emparejes un AVR con unos altavoces particularmente exigentes, no vas a notar la diferencia.
A todo esto hay que sumar que un AVR tienen multitud de conexiones digitales que permiten que fuentes de muy distintas calidades den una calidad de sonido final "idéntica", de modo que se simplifica (y abarata) la elección de la fuente.
Mi consejo es: comprate un AVR descatalogado que tengo todas las funciones necesarias (si tiene HDMI tipo repeater casi seguro que es el caso), y unos buenos bafles a tu gusto, de no menos de 6 ohmios (mejor 8) y sensibilidad no inferior a 89 dB/w/m, y cumplirá.
saludos y perdón por el ladrillo.