Si me permitis divagar un rato os comento mi parecer.

Si lo que se busca es la mayor aproximación a la experiencia real de asistir a una opera en un asiento privilegiado entonces olvidaros de los altavoces y el multicanal: estamos hablando de Realidad Virtual y este campo va por otros derroteros. En este sentido se puede llegar a la paradoja de que para recrear una realidad hay que olvidarla como fuente y partir de algo totalmente artificial: una especie de opera de juego de videoconsola pero a lo bestia.
Lo mejor para engañar a los sentidos: bypasearlos. El día que se pueda de alguna manera interaccionar sobre los estimulos cerebrales adios al audio/video tal cual lo conocemos.

Otro aspecto es el de la creatividad, el de la emoción de ver en tiempo real como un grupo de personas "crean" algo que, al ser música, se desvanece conforme está siendo creado. Eso es la antitesis de la realidad virtual artificial.

Por ejemplo en jazz, al ser música con un fuerte contenido improvisado se puede afirmar con cierto criterio que los mejores solos de la historia no han sido grabados, a saber donde se tocaron y en que condiciones... Esa música improvisada fuese donde fuese, desaparecio para siempre....

Y también por muy mal que suenen las grabaciones de los Hot Five de Armstrong, son una de las cimas de la creatividad jazzistica nunca grabada. Aqui la mala calidad audio es superada ampliamente por el valor emocional de la música.

Y eso es lo que interesa, ¿no?