A mí eso me sirvió de excusa para desprenderme de mis monitores y hacerme con las torres de la misma marca y gama que pesaban casi 50 kilos.
Eso no se le podía caer a la criatura por mucho que tropezara o se agarrase.
Si te soy sincero, me da más miedo colgar unos altavoces que ponerlos sobre el suelo.
A todo esto, felicidades por tu paternidad, lo de las cajas tiene precio, pero eso ni con la mastercard