Lo cierto es que si uno se pone nunca termina de ser el momento perfecto para la compra de un televisor, porque primero se espera uno a la gama nueva, luego a ver las críticas de medios expertos, más tarde a ver que dicen los primeros usuarios (para no ser tú el que pueda pagar el pato) luego a ver si bajan un poco más precio, más tarde a ver si llega alguna oferta por navidades y el círculo vicioso se cierra esperando la gama nueva...