La réplica de Montilla no ha dejado indiferente a nadie. Ha comenzado diciendo que era una "falsedad" porque "no es por rotular en castellano, es por no rotular en catalán". : "Ya, pero El Corte Inglés, usted lo ve, no es «El Tall Anglès», no lo hemos obligado, eh?", dejando claro cuál es la naturaleza del problema: "El problema es que, con el tema de la lengua, busca problemas donde no hay".
Rivera tiene que aprender a no confundir rótulos e información que ofrece la empresa con el nombre o razón social de la misma que es intocable.

Otra cosa es que el gobierno de Cataluña considere que puede decirle a un empresario en que idioma escribir para llevar su negocio.
Es cuestionable que se haga, pero sólo se sanciona cuando no se rotula en catalán.