El número demográfico no debería ser un problema siempre y cuando el país mantenga un número determinado de ingresos vía impuestos de la índole que sea (hay centenares de impuestos en nuestro país), y lo que debe quedar claro y cristalino, que el pago de las pensiones debe formar parte a esos pagos incuestionables y que cada año fluctúa en función del número de jubilados y pensionistas (no todos ellos son jubilados en edad).

Una vez se asuma eso, ¿qué más da si la hucha de las pensiones está llena, media, o vacía? Deberá disponer del efectivo preciso para poder cumplir todo el año el pago de las pensiones. No hay más.

El problema grande es que las pensiones no se pagan con dinero ahorrado del Estado, sino se pagan con el dinero recaudado el año anterior e incluso el trimestre anterior. En este punto, cambiar el modelo, cuando se haga, siempre deberá convivir el modelo actual con el nuevo, porque todos los que ya hemos cotizado en el modelo actual, ya hemos perdido ese dinero pagado, porque sencillamente ya se gastó.

Yo sinceramente la mejor fórmula futura es combinar un modelo mixto. El Estado cubrir X, que podría ser hoy día 600 € por persona, y el resto por privado (plan privado gestionado por el trabajador), que haga que una persona fácilmente cobre si hizo los deberes, un mínimo de 1.000 € / mes en las fechas que estamos (600 € + 400 €).