A mí también me parece repugnante. Y me parecería aún más lamentable si fuese una venganza contra la AVT, recordemos la manifestación de Madrid a la que asistieron unas mil quinientas personas, más o menos. Y ya me quedaría sin calificativos si esta actitud del sr. Ministro tuviese relación con las no conversaciones que tampoco existen con la banda ETA, por si se sienten agraviados, vamos. En fín, pena de país.