Añadido está el cambio realizado en la Constitución, si, esa que para unas cosas es complicadísimo tocar y para otras basta con un fin de semana. Pues un simple cambio por el cual en el caso que España tuviera que hacer un impago antes cobrarán los tenedores de bonos y después, si sobra, habrá dinero para el resto de gastos del estado español, estos gastos son sanidad, educación, empleo, infraestructuras, justicia, ...... todo.
Hasta este momento la deuda soberana era una deuda no exigible, el estado español era soberano, con todo lo que esto conlleva, pero desde ahora la deuda tiene total prioridad. Primero paga, luego ya comerás.
Por cierto, Islandia tampoco tragó este sapo.