No es una teoría loca tuya, Antonio. Tiene mucho sentido.
En realidad, yo soy de los que creen que "casi" todo tiene su razón de ser.
LG no es ninguna empresita de andar por casa. En un consorcio de empresas impresionante. Ocurre sin embargo que en su propio país ha estado a la sombra de Samsung, que es un gigante corporativo que absorbe el 20% del total del PIB de ese país, que no es poco.
Ambas empresas coreanas se insertan en un fenómeno que implica abarcar MUCHAS líneas de producción en diferentes ámbitos; uno no verá una lavadora Sony, pero Samsung y LG se dedican de pleno a la línea blanca como si lo hubieran hecho toda la vida.
Una de las grandes diferencias entre LG y Samsung es que esta última domina un mercado que tiene MUCHA influencia en el cliente final -por cantidad de usuarios-; el de la telefonía móvil. No hay que decir lo que es Samsung para lo móviles, porque se ha convertido en un referentes mundial junto con su gran competidor estadounidense.
LG no ha tenido tanto éxito en ello, incluso habiendo sido -y siendo- proveedor de pantallas para grandes marcas. Sin embargo, como tal LG, nunca ha llegado a calar tan profundamente como Samsung.
Por otro lado, es una empresa que habiendo adoptado el mismo modelo de diversificación que practica Samsung, vendiendo muchas cosas diferentes, trató de competir con su "hermana mayor" adoptando una política de precios más contenida y tratando de llegar a un mercado muy amplio gracias a la facilidad para comprar lo que LG vendía. De esta forma, no es raro que se vea un partido de fútbol en el bar de la esquina coon los compis, y sea un LG que se compró en una gran superficie a precio imbatible.
Eso no quiere decir que LG se dedicara únicamente a fabricar lo mismo pero más barato. Ni mucho menos. Lo que ocurre es que la percepción que el público puede tener de algo es la que se identifica con determinadas cosas que les son familiares. Y en esto, LG ha cobrado más familiaridad por algunos productos que no pertenecían al segmento premium.
Por supuesto, estos coreanos saben qué es lo que ocurre, igual que los chinos también saben que la mayoría de la gente los identifica con productos de calidad dudosa, por mucho que esto no sea necesariamente cierto en absoluto (más de uno se soprendería de lo que Huawei y Xiaomi son realmente como empresas de alta tecnología).
Es muy probable que la apuesta OLED por parte de LG haya sido el tratar de matar dos pájaros de un tiro; por un lado, arriesgarse con un producto que si salía bien los ponía a la cabeza de la tecnología de imagen. Y si salía mal los metería en un problema del demonio. Fijaos lo que ha pasado con Samsung y su Note 7; un solo modelo de móvil ha sido capaz de tambalear todo el tinglado. Y ni siquiera era un modelo que pertenezca a la serie más importante de su colección.
Y, por otro lado, si la apuesta salía adelante con éxito, serviría para poner a LG otra imagen mucho más prestigiada.
Tengamos en cuenta que todos sabemos que ha habido Plasmas TOP y plasmas apañaditos. Ni que decir que hay LCD/LED TOP y apañaditos (o tremendos fiascos). Es decir, que dentro de esas tecnologías hay segmentación de calidades.
Pero en OLED no. OLED se inserta solo en gama premium. No hay OLED apañaditos.
Por tanto, si OLED = premium y OLED = LG...
Entonces...
Interesante este mundo de empresas, ¿no?
Claro, no es de extrañar que todos nosotros nos preocupemos de que haya OLED más baratos, preguntemos por ello y tal..
Pero si tratamos de ver las cosas desde el punto de vista de LG...quizás las respuestas vengan solas.