No creo que la diferencia pueda ser los gráficos o el aparente diseño cool de una o de otra consola. Al menos, en mi caso, la compra de una o de otra dependería casi de forma segura por el catálogo de software que tienen detrás. Al final de todo, siempre acabamos jugando a los mismos juegos. Si una de las consolas nos puede ofrecer lo que queremos disfrutar y la otra no, entonces la elección es clara.

Detrás quedan, y en esto estoy de acuerdo con Shinji, toda la parafernalia de ver películas en la psp o similares, teniendo en cuenta que ahora mismo hay multitud de cacharros portátiles que soportan, con discos duros interminables, la reproducción de películas, y seguramente con mayor batería que la psp. Aquí hablamos de la jugabilidad.