Partido que, en principio, apuntaba a trámite. Líder contra colista en el campo del primero. Ha servido para que, además de la comentada reaparición de Abidal, jugadores como Cesc y Alexis recibieran un balón de oxígeno en su grado de confianza. Algo que, si tiene un poco de continuidad en próximos partidos, puede venirles muy bien a ellos y al Barça en este final de temporada.
Ahora a esperar la llegada del PSG el miércoles.