Cualquier tecnología suficientemente avanzada es indistinguible de la magia Arthur C. Clarke
.... pero al año aparece otra que te chafa la magia
Bueno, pues entonces son 19 y pico buenas páginas.
Teniendo en cuenta cómo empezó, no está nada mal.
Última edición por Damepan; 23/07/2018 a las 21:26
Quería llamar la atención sobre la moda, políticamente correcta eso si, del lenguaje inclusivo, que comienza a pasar de lo anecdótico a lo absurdo, como el famoso "miembros y miembras".
Confundir y mezclar el genero gramatical con el genero biológico ya de por si es de una incultura supina. No imagino a ninguna persona normal molesta porque no exista el masculino de la palabra "mesa", que como todo el mundo sabe gramaticalmente es femenino.
En segundo lugar, como de todos es sabido, una de las reglas básicas del lenguaje es el de la economía lingüística, siendo uno de los principales mecanismos de evolución en lingüística. En el lenguaje, como en cualquier actividad humana, existe una tendencia natural a tratar de minimizar el esfuerzo invertido, lo que puede manifestarse en distintas maneras de abreviar, acortar o simplificar la forma de transmitir una misma información. Es decir, justo lo contrario de lo se pretende desde algunos sectores.
Tercero, los mismos sectores que propugnan el lenguaje inclusivo y que suelen presumir también de ecologismo, no han caído en la cuenta del gasto que supone en papel y por tanto en arboles a talar, que a partir de ahora se escriba todo con dicho lenguaje inclusivo. Los textos se alargarían "un pelin".
En cuarto lugar, todos los adalides del lenguaje inclusivo adolecen de un desconocimiento absoluto de una de las realidades bien conocidas por cualquier persona que haya leído un poco sobre antropología: que el lenguaje inclusivo es el retorno a la superstición.
Me explico.
Los antropólogos saben desde hace mucho que en las sociedades primitivas se da un valor mágico a la palabra, hasta tal punto que muchas consideran que decir o no decir determinadas palabras ayuda a modificar, moldear o mantener una realidad.
Superstición e ignorancia, por supuesto.
Pues bien, ahora nos encontramos en pleno siglo XXI con que muchos propugnan el tan de moda lenguaje inclusivo, en la absurda y supersticiosa idea de que modificando el lenguaje se puede modificar la realidad, exactamente igual que creen las sociedades primitivas.
Como si el hecho de que mañana todo el mundo utilizara dicho lenguaje inclusivo del feminismo políticamente correcto, evitara que un descerebrado asesine a su mujer.
Desgraciadamente eso no lo evitara, tan solo habremos entrado nuevamente en la superstición de creer que "la magia de las palabras" moldeara la realidad.
Saludos.
La palabra y el lenguaje tienen mucho poder. Dar un nombre a las cosas es el ejercicio intelectual primordial que nos distingue (en principio) de los animales.
El lenguaje evoluciona con la sociedad, y así lo recogen las entidades lingüísticas pertinentes.
El lenguaje inclusivo es un signo de cambio, pero primero de la sociedad y no al revés.
Normal que alguno más tradicional se resista, pero si se usa, se quedará.
Estoy de acuerdo en lineas generales con lo que comentas Empeci, y tambien en parte con lo que tu comentas Damepqan.
Pero comentas algo importante desde mi punto de vista Dame, El lenguaje inclusivo es un signo de cambio, pero primero de la sociedad y no al revés. Quizas ahi radique la cuestion. El lenguaje "inclusivo" no ha nacido de la sociedad, sino de determinadas corrientes en las elites de determinados partidos. Ha nacido de "arriba a abajo", y no como deberia ser.
Efectivamente El lenguaje evoluciona con la sociedad, y así lo recogen las entidades lingüísticas pertinentes. Y resulta que nuestros politicos, pretenden situarse por encima de esas entidades linguisticas que comentas. En resumen, pretenden IMPONER un determinado lenguaje.
Yo particularmente prefiero una sociedad que haya leido muchisimos libros, aunque no tengan "lenguaje inclusivo" a otra que no haya leido ninguno y que se exprese con lenguaje "inclusivo".
Saludos
Está claro Salmengar, pero creo que también lo está que si la sociedad no hace uso de un vocablo o expresión, este se pierde.
Si el lenguaje inclusivo se percibe como una pirueta estúpida, en 5 años será un recuerdo, hagan lo que hagan los políticos sólo servirá para certificar lo alejados de la sociedad que viven.
En cambio si se trabaja de verdad para la equidad entre sexos, a pie de calle, se quedará.
Son como los anglicismos y barbarismos; por feos y absurdos que sean, y aunque tengan uno o más equivalentes perfectamente válidos y hasta bonitos en tu lengua natal, si se usan de forma práctica, y si quién los usa tiene visibilidad, acabarán perdurando e incorporándose al léxico.
Y los que no, pues se perderán, como muchas palabras asociadas a oficios de artesanía (por ejemplo). Si se pierde la profesión del artesano, se pierden sus palabras.
Esto no hay quién lo domine, pues la calle y lo que allí se habla, es libre.
Hay mucha razón en las cosas que decís.
Aquí, hablábamos principalmente latín y nuestros idiomas, derivan de ello. La gente hablaba a oído, casi nadie escribía y, por tanto, no había normas sobre el lenguaje. Así, sabemos que el río Ebro debe su nombre al río Ïbero, Zaragoza, a Caesar Augusta, Tarragona a Tarraco Nova y Cartagena a Cartago Nova, por citar algunos.
Hoy no sólo prácticamente en el mundo civilizado todo el mundo escribe y sabe leer, sino que, además, hay normas para preservar la esencia del idioma (la RAE, por ejemplo) y que vela porque el idioma se enriquezca, pero la esencia del idioma, se mantiene (llevamos más de 500 años con alguno de ellos). Si renunciamos a eso, se comete un error.
Si dejamos el idioma al libre albedrío y sin normas, podríamos decir que la vicepresidenta, nacida en Cabra, municipio de Córdoba, es una cabrona.
Pues no, decir eso es un error, un error propio de incultos ; es, gracias a las normas y al latín, EGABRENSE, luego mejor no saltarse las normas en esas cosas, creo yo.
Con el plural, pasa lo mismo. Y no sólo eso, sino que provocaría enormes errores jurídicos, pues si se diferencia o se pretende diferenciar el plural, cuando eso no se haga en cualquier Ley, el género femenino quedaría INDEFENSO ante la Ley, porque el plural sólo se referiría al género masculino y eso sería generar un problema mucho más grave de lo que se cree, problema en el que me temo no ha caído más de uno.
Moraleja : una cosa es la igualdad, cosa que cualquier mente razonable debería defender pero sin hacer el tonto, y otra es que seguramente por incultura e ignorancia, se haga el tonto y hay que prevenir para que no se haga el tonto y el ridículo inútilmente.
Yo, me quedo con lo primero. El populismo, aunque vende, es comer basurilla hoy y mierda mañana, aunque parezca que mola.
Un saludo.
Pero todo esto que dices, no tiene nada que ver con intentar cambiar la constitucion por el "uso de genero del idioma" en la misma.
Como bien comentas, estaremos mas o menos de acuerdo en el uso del idioma, sus palabras, los anglicismos, la informatica, etc. pero nada tiene que ver con la igualdad entre hombres y mujeres. Por eso mi opinion es, que intentar mezclarlo es una gilipollez.
Saludos