LLegaba este título precedido de su fama. Película más taquillera en Rusia, más de 20 millones de presupuesto, el aclamado Konstantin Khabenskiy como protagonista, efectos especiales de última generación por ordenador...Pelicula basada en la figura de Aleksandr Vasilievich Kolchak, explorador. oficial de la Armada Rusa y posteriormente líder de una de las facciones del Ejército Blanco antibolchevique durante la guerra civil rusa.

Ignoro si ya está a la venta en nuestro pais, en tiendas online sólo se encuentra la versión subtitulada en inglés, sin que haya podido averiguar si doblarán la película y a qué idiomas. Dependerá del distribuidor, como siempre. Por Francis circula una versión subtitulada en español, pero, y ojalá me equivoque, dudo mucho que esos subtítulos hagan justicia a la cinta.

La película en si es entretenida, con ciertas escenas de acción muy logradas que no es de recibo destripar aqui. Asimismo la escenografía, los decorados, localizaciones y vestuarios son de lujo, cuidadísimos. Quizá algo deslabazada en las escenas románticas, con cierto sabor a "Titanic" y que en ocasiones parecen forzadas. Al menos se ha conseguido transmitir la peculiaridad del pueblo ruso en sus relaciones amorosas, mucho más frios y menos
temperamentales, así como en su profunda religiosidad (se pierde la cuenta de la de veces que se besa a ikonos de cristo en tablillas). Tambien se nota la occidentalización del cine ruso en secuencias como el aturdimiento del protagonista tras ser sacudido por la onda expansiva de una explosión, al modo de Tom Hanks en el inicio de "Salvar al soldado Ryan" (y que tambien se ha podido ver últimamente en "Valkiria"). Hay más ejemplos, pero los dejo
para su descubrimiento.

Por supuesto, y como no podía ser menos, se rinde tributo a "El acorazado Potemkim" en una escena determinada, retratando fielmente la reacción que produce en los hombres la muerte de una mujer, al modo de la madre asesinada por los cosacos en la escalera y el carrito de bebé desplazándose sin control escaleras abajo que mostraba Eisenstéin.

Pero la historia, ah la historia. Eso es harina de otro costal. Ni una sóla mención a la época "polar" del protagonista, ni a su obligado paso por EEUU e Inglaterra tras ser "amablemente" exiliado, ni a su enfrentamiento con los socialistas revolucionarios, ni a Anton Denikin, ni a su autoascenso a almirante, ni a sus aspiraciones dictatoriales, ni a...bueno, un coladero. Además se ha alterado el orden cronológico de algunos hechos, como por ejemplo hacer coincidir en el tiempo su entrevista con el Gran Duque Nikolai con la obtención del mando de la flota del Mar Negro.

Ahora que circula por la Madre Rusia la costumbre de rehabilitar memorias, algo que hasta el propio Kappel y el Zar Nicolás II han conseguido a título póstumo, puede que este film ayude a hacer lo propio con Kolchak.

Total, a este ritmo hasta Vlásov será rehabilitado.

Saludos