Lo que realmente me entusiasma del cine... es justamente lo que Malick aporta en sus films, un viaje que sube a los espectadores en la gran balanza del "Amor u Odio" de sus obras.
Personalmente soy conformista, pues tras llenar el vació cinéfilo con títulos de evasión comercial durante meses, Malick me reconforta con su magistral ceremonia de imágenes impactantes de poesía en movimiento.
De vez en cuando, es bueno regresar al amor primero. Menos mal que hay directores con ganas de mostrar que la vieja escuela aún late por sobrevivir frente al cine-basura.
Gracias Malick