Parecía,en un principio,clara ganadora para el oscar a mejor pelicula,y puede que asi sea.

Pero para mi ha sido una decepción, cojea por muchos lados, esperaba más profundidad en los personajes y al final acaba pareciendo una mera caricatura de lo que fueron en la realidad.

Sean Penn hace un muy buen papel, como casi siempre,y el resto de secundarios están todos a muy buen nivel,dentro de lo que cabe en un guión que tiene poca chicha y se desinfla.

Está muy bien realizada y dirigida, pero el mundo gay no es tan superficial como lo pintan en esta pelicula, enfocada a la campaña de Harvey Milk y sus distintas relaciones, que parecen basarse sólo en el sexo.

Una lástima, pues esperaba más de Gus Van Sant, director bastante irregular...pero que nunca deja indiferente.