en mi lamentable opinión, la peli es un espléndido entretenimiento que, desgraciadamente, me entretiene menos cada vez que la vuelvo a ver

la batalla inicial es espléndida, cierto, y quizá lo sea por la espectacular deuda que tiene con la batalla de Campanadas a medianoche de Orson Welles, aunque en este caso Orson logró lo mismo, si no mejor, con cuatro extras y un panadero que pasaba por allí, además de él mismo huyendo

las patadas a la historia pues como que me la refanfinflan: esto es cine, no un congreso de romanistas

por criticar algo, pues que el malo no es que sea malo, es que es tonto, para variar, y los malos tontos aburren mucho, por más que son poco creíbles: de ordinario, la maldad tiene mayores adarmes de inteligencia que la bondad, suele ser bastante más compleja. Un buen ejemplo de lo que digo podría ser Scaramouche (la novela original de Sabatini, no la película)

en este último sentido me interesan más películas de scott como Los duelistas o Blade Runner, quizá sea porque las historias originales en que se basan tienen cierta entidad, y eso se nota

propicios