Brillante introducción a esta obra fascinante; en directo es de un impacto difícil de superar -en concierto, quiero decir, en su forma original de ballet no la he visto. Me gustaría recomendar dos versiones: para quienes les guste gozar a toda orquesta la de Esa Pekka Salonen con la Philharmonia Orchestra (Sony), de los años 80, de una furia desbocada; y otra más "para todos los gustos", la de Antal Dorati con la Sinfónica de Detroit (Decca), menos desbocada, clara y ordenada pero con fuerza.

Saludos