La historia de Syd es bien conocida para los seguidores de la banda. Era el lider de los comienzos, un tipo simpático y excéntrico que cruzó el puente que conduce a la droga, marihuana y LSD. Éstas le inspiraban en sus composiciones pero desgraciadamente se pasó de rosca, bien por abuso -sobredosis- o por una enfermedad mental latente (quizás esquizofrenia) le inhabilitó para llevar una vida "normal" si por normal entendemos la de un conjunto de rock.

Antes de su definitivo crack consiguió publicar el primer disco de la banda, el extraordinario "The Piper At The Gates Of Dawn", así como una serie de singles que luego se recopilarían con otros temas en el álbum "Relics". También hay temas suyos en "More" "A Saucerful Of Secrets" y su influencia en la banda es patente hasta el giro sinfónico que se produce en "Meedle", si bien estará presente en toda la vida del grupo, como puede verse en los extraordinarios "The Dark Side Of The Moon" y "Wish You Were Here".

Cuando la banda decide sustituirle por su amigo David Gilmour (mediante el socorrido procedimiento de no irle a buscar la noche en que daban un concierto), pretende seguir su carrera musical en solitario. Gracias a los esfuerzos increíbles de Gilmour conseguirá lanzar dos discos: The Madcap Laughs y Barrett. También producirá material para un tercero, Opel, que no se editará hasta muchos años más tarde (1988, si no recuerdo mal). Posteriormente, piratas aparte, aparecerá el álbum "The Peel Sessions" con versiones alternativas de algunos de sus temas y que es realmente delirante.

Como anécdota se puede contar que editando la canción Dominoes, no había manera de conseguir que tocara la parte suya, la de guitarra, de forma correcta. Gilmour, desesperado porque le echaban los perros en el estudio de grabación rebobinó por error a velocidad normal la cinta, escuchándose la canción al revés. En ese momento Syd reaccionó y tocó la parte de guitarra de una sola vez sin interrupciones ni fallos.

Momento para repasar el DVD documental que ha puesto Curtis, francamente interesante.

A ver si hay suerte y los 4 deciden juntarse de nuevo para darle un concierto homenaje al fundador e inspirador de esta banda mítica, que editen el disco DVD y cedan los derechos a alguna causa benéfica. Al fin y al cabo, todos hacen declaraciones de que una buena causa obliga a enterrar el hacha de guerra.

En Braindamage, por cierto, dicen que en Live 8, todos los famosillos, como los Beckham se dedicaban a beber champán francés de gorra en el reservado, pero que cuando tocaron los Pink Floyd, no quedó allí ni un alma.