Ah, siempre es interesante conocer el contexto histórico y vital de los artistas, a fin de cuenta sus obras son producto sus vivencias y de sus circunstancias, sin demérito de sus cualidades artísticas. Especialmente en el caso de Silvio y de otros artistas que hacen de la política y su compromiso social un eje central de su trabajo, no deja de ser decepcionante que su defensa de los más desfavorecidos le haya convertido en la voz del régimen cubano, un mamotreto social de imposible digestión.

Pero nadie dijo que los artistas tenían que ser santos.

Elena Burke (junto con Omara Portuendo) son de una generación anterior como dices, pero tutelaron y apoyaron activamente a los novos trovadores de Cuba, especialmente a Silvio, Pablo y Amaury. Muy recomendable por cierto el disco de homenaje al filin de Pablo Milanés... como casi todo lo que ha editado.

Saludos