El verano de 1778 en Paris, Mozart daba clases de composición a la hija del Duque De Guines. Ella era arpista y su padre tocaba la Flauta. El Duque era un miserabilis que le regateaba siempre el valor de las clases a su hija, aparte de ser un moroso en el pagos. Carta de Mozart a su padre el 31 de julio:

"Monsieur le duc no tiene una pizca de honor en todo su cuerpo …; hace más de cuatro meses que le envié un Concierto para flauta y arpa, y todavía no me lo ha pagado. Lo que me indigna de estos estúpidos franceses, es que creen que aún tengo 7 años, que era la edad que tenia cuando me vieron por primera vez."




Saludos