Estos eran de mi barrio y amigos de mi hermano. Rosendo tocaba con ellos al principio pero se marchó para formar Leño. José Carlos Molina era todo un personaje sin problemas de ego, no te pierdas el video que pongo donde reconoce abiertamente que las influencias de los Tull y de Ian Anderson eran mutuas, se copiaban entre ellos
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Rosendo ya era un figura entonces, un tipo con bastante talento que destacaba sobre todos.
Las letras y la forma de encajarlas eran... ejem... digamos que mejorables, pero lo que más me gusta es la forma de cantar que era común a casi todo el rock urbano madrileño que se hacía en aquella época y que provienen de la más arcana tradición eclesiástica de las homilías, pero hay que reconocer que su longevidad y su fidelidad al estilo han permanecido casi inalterables.
Saludos