Sharp no ha sabido hacerse un hueco en el mercado europeo. En mi modesta opinión porque decidió renunciar a los altos estándares de calidad que ofrecía en Japón para competir con las coreanas en delgadez. Si hubieran combinado la tecnología quatron con un buen full-led, en lugar del siempre problemático edge-led, lo habrían logrado. Sin embargo, se imponía la moda de las teles super planas y ellos han entrado ahí a perder dinero (no sé si recordaréis que entre 2012 y 2013, Sharp estuvo al borde del colapso).
No sé por qué no trataron de insistir en las ventajas de un aparato algo más grueso pero sin el maldito clouding, y tratar de vendérselo a sus clientes así. Al fin y al cabo, los amantes del plasma está dispuestos a disfrutar de una tele con algo más de trasera, a cambio de calidad de imagen.
Pero bueno, imagino que todo es mucho más complejo de como yo lo veo.