Se aprovechan de la ansiedad del fan. Lo malo de esto es que después sacarán las extendidas y lamentaremos no tener las ediciones cinematográficas, caeremos, y cuando saquen las ediciones definitivas otro nuevo formato se avistará en el horizonte dispuesto a renovar nuestras ansias consumistas.
Me pregunto si realmente amortizamos el dinero que nos cuesta todo el material que compramos o si sólo actuamos como coleccionistas compulsivos.
Yo personalmente disfruto coleccionando y no hay ni una sola que compre que no la vea, pero a la hora de la verdad siempre me encuentro volviendo una y otra vez a un puñado muy reducido de pelis que forman parte de mi vida.