La dama de oro (Simon Curtis, 2015) 4*.
Imagen bien pasada de brillo (enesima chapuza de EMON ), con una definicion muy variable, aunque en general aceptablemente buena. La fotografia varia desde un tono neutral (en escenas contemporaneas) a uno marcadamente calido (escenas de niñez), pasando por una paleta de colores que imita al de la primitiva pelicula Agfacolor de los años treinta y cuarenta (escenas de la epoca del "Anschluss" austriaco).