Aunque entiendo la comodidad del doblaje para el espectador, personalmente prefiero disfrutar el contenido audiovisual en versión original y no en versión doblada porque prefiero escuchar la voz del actor a la del doblador. A día de hoy, cuando he comparado un doblaje con una versión original, en todas estas comparaciones sale ganando por bastante diferencia la versión original. Si a esto se suma el asunto de la codificación del audio, objeto de este hilo, para mi gusto personal la elección es clara: Versión original no doblada.