Por regla general siempre soy partidario de comprar lo último (consideraciones económicas aparte) pero creo en este caso también está justificado: Procesador de video completamente nuevo (que era el gran punto débil de los OLED de LG), BFI (veremos si en la práctica utilizable), smooth gradation, panel de 2018 (por pocas mejoras de brillo y/o durabilidad no va ser peor que el de 2017 y quien sabe si puede taer mejoras en cuanto a uniformidad), nuevo tamaño de 77" en gama bajas y más baratas, etc..