Aunque el hilo tiene ya un año, este tema sigue vigente y seguirá por los siglos de los siglos.

Quien manda en los mercados (productos de consumo), es el marketing. Una buena campaña, puede hacer que un peor producto se compre mucho más que otro.

Hay miles de ejemplos, pero el más común, hace años a los fabricantes de coches se les cruzó que había que vendr diésel porque consume menos y es más barato, haciendo que un motor más delicado, con más problema y menos finura se venda 9 a 1 contra su homólogo gasolina más fino, más suave y desde hace años casi igual en consumo. Caló tanto el mensaje que millones de coches de menos de 10.000 kms/año se compran diésel cuando deberían ser gasolina, encima contaminan muchísimo menos.