Los usos extremos de cualquier producto, nunca son los usos habituales.
Nadie se compra un frigorífico para estar en el Polo Norte ni tampoco nadie compra un calefactor para un desierto de África.
La tv hay que verla de frente, si el sofá es de 4 plazas debe de estar lo suficientemente alejado, para que los desafortunados asientos laterales, su inclinación con respecto al centro de la pantalla sea lo mínimo posible.
Si eso no se consigue, está claro que no se compró correctamente el tamaño del tv con respecto al sofá y su campo de visión.
Yo jamás compraría un deportivo para meterlo en la Selva Amazónica, es de cajón.