Si, eso mismo estaba yo pensando, que lo que oímos al reproducir esos videos no es la calidad con que se grabaron, y que por supuesto también influye si no se hace en la misma sala y con el mismo equipo de grabación, si no además como lo escuchamos en nuestro PC ese video. En cualquier caso, y con esto no quiero sembrar polémica ni contradecir a nadie, el ser humano se mueve por distintos sentidos y que a priori para elegir un altavoz debería premiar el oído frente a cualquier otro sentido, también la estética (vista) y hasta el ego personal de cada uno de poder tener en el salón un equipo de cierto pedrigrí o marca frente a cualquier otro.

Eso ocurre en muchos productos, desde lo más básico que sería la comida, la ropa, trajes, vestidos o camisas, hasta el coche, televisor o cualquier cosa que se nos ocurra.