Manuel, en 30 años las cosas cambian mucho, para bien o para mal, hasta nosotros cambiamos.

En mi ciudad había una muy buena tienda de discos (que recuerdos), era rara la semana que no iba a comprar alguna ofertilla, cuando encontraba una buena, escondía el disco hasta que tenía los duros ahorrados e iba a por él. Siempre recordaré unos monitores puestos en el suelo y que aquello sonaba a gloria en comparación con lo que tenía en casa, la definición que tenían a tan bajo volumen siempre me hacia fijarme en ellos, "B&W" ponía en la tela y ni idea de que marca eran, simplemente me encantaban.