Un altavoz con una impedancia de 8 ohmios exigirá cierta potencia al ampli para sonar a determinado volúmen, si la impedancia del altavoz es de 4 ohmios exigirá el doble de potencia al amplificador para sonar igual y si es de de 2 ohmios el doble que el de 4. Todos con la misma sensibilidad.
La impedancia de los altavoces es variable ningún altavoz con impedancia nominal de 8 ohmios (o la que sea) está contínuamente en ese valor. Cuando la impedancia cae (que lo va a hacer sobre todo en bajas frecuencias) exigirá más potencia al amplificador (como he dicho si cae a 4 ohmios exigirá el doble) y si el amplificador no es capaz de proporcionarla (de en ese caso doblar la potencia) es cuando habrá problemas, se calentará demasiado y saltará la protección.