Pero los verdaderos aficionados a este mundillo, como a cualquier otro, sabemos ... o deberíamos saber, que el marketing y el placebo, están justo al lado de nuestro ego de satisfacción al adquirir ese producto que durante un tiempo hemos anhelado tener.

Y si además, dicha afición se une al de los sentidos más propios como el sonido, la estética, el sentir ... nos hace caer en tópicos difícilmente justificables para alguien fuera de esta afición.

Y para los de la misma afición, como digo al inicio, ya sabemos de que va este palo, y el que aún crea en magia sonora, pues lo celebro y que disfrute muchos años.