Realmente, en informática hay una máxima en cuanto a este tipo de servicios.

Si un servicio es gratuito, lo que se debe entender es que la mercancía eres tú y por tanto, estas empresas comercian contigo.

Que lo aceptes o no ya es cosa tuya.

Yo sí soy usuario de redes sociales, sabiendo lo que es. También tiene cosas buenas. Yo por ejemplo, he retomado contacto con gente que no veía desde la infancia o estoy en contacto con un primo mío que vive en Suecia.

Pero hay otros que utilizan estas redes para intentar adoctrinar, por ejemplo, a esos los tengo a todos capados. O el que te está colgando "tontás" a todas horas. Buf, que cansino.

Vamos, que todo esto tiene su parte buena y su parte mala. No hay que demonizarlo, pero sí hay que tener cuidado de como se usa.

Y tengo otra máxima. En las redes sociales no pongas nada que no quieres que alguien sepa. Nada que no mostrarías en tu vida real con los amigos, contacto del trabajo, vecinos, etc. Porque al final, todo sale.

De hecho existen empresas que crean perfiles de usuario basados en la actividad de las redes sociales y se hacen estudios sociológicos o se venden datos a empresas de publicidad o incluso a empresas de selección de personal, etc. Los famosos Big Data.

Y sí, existe una Ley de Protección de Datos, pero su aplicación es muy complicada en estos casos.