Yo tuve en su día dos procesadores externos dedicados de Yamaha intercalados con amplificadores o receptores teniendo hasta configuraciones "diabólicas" para el momento : 11/12 altavoces en la sala con una cantidad de parámetros configurables impresionante (por que en los receptores no se puede). Y me encantaba escucharlo así, toqueteando los distintos parámetros, la habitación -literal- temblaba.

Ahora tengo en casa un receptor pequeño Yamaha (guardado), están conseguidos los DSP de Yamaha pero nada que ver con la sensación de los altavoces dedicados al DSP.

Pero ahora con el tiempo (de edad), y sin nada de Yamaha también prefiero un stereo bien "colocado"....