Lo que Manuel quiere decir es que el subwoofer tiene un comportamiento omnidireccional, es decir, no se detecta la procedencia de su emisión de sonido en una dirección única y, por eso, se podría colocar casi en cualquier posición. Lo mejor es colocar y probar e ir moviéndolo por distintos puntos de la sala y quedarte con el que mejor suene (o mejor encaje).