El punto de partida para el proceso MQA es un fichero en High Resolution. Este fichero puede tener una frecuencia entre 44.1 kHz y 192 kHz. Por supuesto, en 24 bits. Usando el algoritmo MQA esto se deja en formato FLAC bien a 44.1 kHz o bien a 48kHz, e instrucciones para hacer el decoding. Este fichero se puede ejecutar sin hacer ningún decoding, por cualquier software que lea FLAC.

Si tienes un Full Decoder, con este input se obtiene directamente el resultado final, a la misma frecuencia que tenía el fichero origen (es decir, entre 44.1 y 192 kHz). Además, se aplican unos filtros tanto genéricos, como específicos al dispositivo que hace el decoding. Y el resultado final, en teoría, se firma (de ahí lo de "authenticated") bien por el artista o por el ingeniero de sonido responsable de la grabación original.

Cuando se hace el primer unfold por software, se obtiene un fichero a 88.2 kHz (si se parte de 44.1 kHz) o a 96 kHz (si se parte de 48 kHz) y se aplican filtros genéricos. Este fichero se puede escuchar por cualquier software que lea FLAC. Además, si se manda a un renderer, entonces se va a la resolución del fichero original antes de la compresión por MQA, y se aplican filtros específicos.

El resultado, pues ya es cuestión de los gustos de cada uno.

Hay muchos DAC que interpretan directamente los ficheros DSD de forma nativa. En algún caso, sí se que se hace un empaquetado de DSD sobre PCM (se llama DoP) pero es simplemente para facilitar su trasmisión cuando la interfaz o el DAC no soportan un flujo DSD nativo.

Y lo que suele hacer PS Audio, por ejemplo, es justo lo contrario: cualquier señal PCM la convierten primero a DSD, y entonces la llevan al DAC. . Esta función, usualmente bajo el nombre "All to DSD" está disponible en varios equipos. Incluso equipos de audio portátil, sin ir más lejos mi FiiO M11 lo hace (convierte cualquier señal PCM a DSD64).

En todo esto no hay ningún "timo". Son simplemente formas de tratar el sonido. Luego, a unos les gustará más, a otros menos, y a otros nada. Pero no existe engaño, que cada uno haga lo que considere oportuno, según sus gustos y necesidades.