Bien usado, un subwoofer decente siempre mejorará el sonido con más presencia, volumen y realismo, dando tridimensionalidad a la música, y no sólo en 5.1, sino también en estéreo. Y sobre todo, con todo tipo de música.
Si el subwoofer ensucia, está mal calibrado/integrado.
Eso sí, mejor dos buenas cajas solas que dos cajas y un subwoofer de dudosa calidad.