Este tema está causando un gran revuelo nacional. Durante estos últimos días, hemos sido testigos como taxistas de toda España se manifestaban en todo tipo de huelgas con la siguiente consigna. “No al intrusismo dentro de nuestro gremio”. Esto se debe primero a Blablacar, una web que pone en contacto a conductores y pasajeros con el fin de ahorrar costes en sus respectivos viajes. Sin embargo, la cosa no acaba aquí. La gota que ha colmado el vaso es lo que se llama como UBER, una aplicación para nuestros smartphones con la que será mucho más fácil encontrar un chófer que nos lleve a nuestro destino deseado.

El funcionamiento es muy sencillo. Solo hay que meter nuestros datos y una tarjeta bancaria para realizar los pagos. Tras esto, ya podremos utilizar UBER con total normalidad. Una vez dentro de la aplicación, podemos concretar nuestra ubicación activando el GPS para después ver directamente en la pantalla de nuestro smartphone qué "taxis particulares" están disponibles cerca de nosotros. Finalmente, solo queda esperar a que nuestro conductor privado nos recoja in situ y decirle a él cuál es nuestro destino. También podremos llamarle por si surge algún tipo de imprevisto.

Podemos decir que la comodidad es una de las grandes bazas de esta aplicación. Gracias a Uber, no hará falta esperar a que un taxi venga a nosotros, sino que será justamente lo contrario. Además, sus pagos se cargan directamente a nuestra tarjeta de crédito. De esta forma no habrá que estar atento si llevamos dinero encima. Además, para asegurarnos de que los conductores son de confianza, estos tendrán siempre una puntuación que irán consiguiendo a través del servicio que den a los demás usuarios.

Una vez dicho esto, ¿creéis que se debe regularizar el uso de esta aplicación? ¿O es el gremio de los taxistas el que debe renovarse?