Poco a poco la familia de productos Fosi va creciendo y con cada serie nueva, el incremento de calidad y prestaciones es evidente. La marca sigue manteniendo modelos muy básicos como la gama de amplificadores TB o sus hermanos mayores BT, pero la marca está viviendo una revolución interna y comercial con los productos de la gama V y Z, por citar dos claros ejemplos, que elevan y mucho el listón de calidad-precio.

Dentro de la gama “Z”, que se distingue por la peculiar forma de puente de algunos de sus componentes, encontramos un amplificador balanceado puenteable (ZA3), un previo de tamaño “medio” (ZP3) y el DAC balanceado (ZD3), del cual presento hoy su análisis.



El ZD3 es actualmente el DAC de gama alta dentro de Fosi, aunque a nivel de prestaciones y conectividad está al nivel de conversores de precio muy superior, como veremos más adelante. El precio actual es de 190 euros (220 dólares), lo que es realmente competitivo. Su presentación, prescinde de la habitual caja genérica de la marca y usa un diseño personalizado para este modelo.


Para evaluar un DAC, siempre debemos tener en cuenta que la implementación del mismo (del chip, concretamente) es muy importante. Es decir, lo que hay “antes” (fuente de alimentación) y lo que hay después (el buffer de salida), por tanto, es tan importante el procesamiento (el chip DAC por entendernos) como todo lo demás.





Se basa en una arquitectura del nuevo ESS/SABRE 9039Q2M, que es la evolución del ES9038Q2M, aportando pequeñas mejoras en un dac que ya de por si da un excelente resultado. Por no irse tan lejos, el Wiim Ultra con el que se ha realizado la prueba monta la versión ES9038Q2M. Este conversor soporta resoluciones hasta DSD512 y PCM hasta 32bits/768 kHz, por lo que cubre las necesidades de prácticamente todos los usuarios, cubriendo la mayoría de los formatos existentes.





Por su precio, no creo que haya un DAC con mejor conectividad, he tenido convertidores el doble de caros con buena conectividad, el Fosi ZD3 por la mitad de dinero ofrece aún más conectividad, lo que favorece en cualquier instalación un factor que puede ser decisivo: VERSATILIDAD Y FLEXIBILIDAD. En mi caso, tengo conectado el PC al ZD3 por USB (ver apartado), al Wiim Ultra por óptico, y las salidas analógicas balanceadas a un amplificador Topping A90 y las RCA a un receptor Marantz. Además, aún tiene disponibles una entrada coaxial y HDMI Arc y conectividad BT (con códecs Aptx).






Construcción y materiales

Como decía en la introducción, el salto de Fosi ha sido considerable simplemente de las gamas inferiores a éstas, lo que quiere decir que por poco más, estamos obteniendo un incremento exponencial en todos los aspectos. Esta construido con un chasis de aluminio de gran calidad, aunque con un acabado que, aunque agradable y mate, es fácil de marcar con huellas y rozaduras, aunque también se limpia bien.

Su nivel de materiales y acabados, está por encima de cualquier marca de acceso, incluyendo la gama de acceso de fabricantes reputados y consolidados, por lo que no tiene nada que envidiar y está a un solo paso de poder construir propuestas muy serias, me refiero a chasis mucho más elaborados (robustos, pesados), aunque éstos no aportarían nada en el resultado final sonoro y si en el aspecto económico, encareciendo el producto más allá de su sonido.


Conectividad

Excelente, no puedo decir nada más. Por este precio no se puede pedir más. Hay productos que por mucho más dinero no ofrecen tanto. Entradas digitales SPDIF (óptica y coaxial), HDMI Arc, USB, salidas RCA y XLR, además de conectividad BT y disparadores Trigger para instalaciones.





El único “inconveniente” que veo al ZD3 es la fuente de alimentación, no porque sea ruidosa (que no lo es), sino por la longitud del cable, que es ridícula (para mi gusto le falta un metro de longitud) y su apariencia, que como decía, aunque es silenciosa, no parece una fuente (transformador) de calidad. Me gustaría ver en el futuro una opción de más empaque (como las que usa IFI) o bien un módulo de alimentación externo que se pueda usar en varios dispositivos como las que usa Topping.

Así que esas son dos ideas directas para Fosi: un cable más largo en la fuente suministrada y la opción de tener un bloque de alimentación externo.






Control

El Fosi ZD3 cuenta en su frontal con un display circular (OLED) de gran calidad, indicando el nivel de salida y en cuatro apartados en su exterior la resolución de entrada, la decodificación (DSD/PCM), la entrada utilizada y una cuarta que indica “volumen”. Son pequeñas y cuestan de ver, pese a su resolución que es buena. La claridad y contraste de la pantalla es excelente.

A la derecha, cuenta con una pequeña rueda de control con pulsación, con el característico color cobre-naranja de la marca, con una muesca que puede inducir al error, ya que es un potenciómetro/control digital de 80 pasos (posiciones) pero de recorrido “infinito”, es decir sin topes. Con cada pulsación cambiamos la entrada. Si lo mantenemos pulsado, desconecta la unidad. Memoriza el último volumen seleccionado, que es el que aplica a todas las entradas.

En su parte inferior, me refiero a la base del producto, cuenta con un interruptor para seleccionar si queremos una salida variable (si lo usamos como DAC-Previo) o fija (como DAC). Personalmente, prefiero usar los DAC con la salida FIJA, y conectarlo a un previo para hacer lo propio de un previo. Y aquí, recalco lo comentado en el párrafo anterior: el inconveniente de tener una muesca sin corresponder con el nivel de salida.



Así que lanzo otras dos ideas para Fosi: que en el display aparezca un aviso para avisar que está por encima de la mitad de volumen, y que indique si estamos en modo “Fixed” o “Variable” en la pantalla.