Interesante artículo de EL PAÍS.

enlace

Como siempre; cuando se da respuesta a algunas preguntas, cuando se avanza en el conocimiento de algo, y por suerte añadiría, se plantean nuevas preguntas y dudas que sirven de estímulo para seguir buscando y seguir arañando fragmentos de conocimiento a la realidad de las cosas.

Sorprende como con pocos descubrimientos, en algunos campos, se da un absoluto vuelco a las teorías establecidas, asumidas como correctas y que atenuaban la angustia que provoca nuestro desconocimiento. Evidentemente es un proceso agridulce. Avanzamos, pero nos damos cuenta de hasta que punto, en ocasiones, por falta de medios, de tecnología, de ensayos realizables, de "pruebas", estamos perdidos y lo que es peor, equivocados.

Neandertales... tan cerca. Evito el chiste fácil de que todavía están entre nosotros, como de los informativos cotidianos podemos deducir, por simple respeto a estos primos cercanos europeos desaparecidos.

Se puede fabular e imaginar que es lo que hubiera pasado en una hipotética coexistencia, al menos mas extensa y próxima, entre neandertales y sapiens. Parece ser que su propia debilidad e incapacidad adaptativa los llevó a su extinción, pero conociéndonos y pese a que por aquellas fechas no teníamos los precedentes que nos estigmatizan... quedan pocas dudas acerca del destino que les tendríamos reservado.


Saludos