Las grabaciones son las que son, nada podemos hacer al respecto. El mobiliario depende, en sala dedicada por supuesto que lo controlas, si compartes uso con otros fines (salón, comedor, etc) no queda más remedio... o sí, depende de tu pareja, libertad de acción, etc. Conozco quien en el momento de la escucha mueve muebles, cubre con alguna manta las típicas vitrinas de cristal, etc.

Respecto al número de personas en la sala, influye y mucho, aquí tengo una opinión un tanto particular, que puede o no coincidir con cada cual. Personalmente creo que nuestra afición (la música, el cine es distinto) es muy onanista, y aunque a veces compartamos entre amigos, no deja de ser para pasar un rato, "cacharrear" o similar, en definitiva socializar, la música es la excusa. Cuando estamos a solas es cuando buscamos esa excelencia, ese detalle, y será en estas condiciones con las que hemos optimizado nuestra sala y acústica. Un tanto egoísta, pero insisto, escuchar música es un placer onanista, no busco compañía para ello.

Saludos.