Yo soy asturiano, y hasta no hace mucho, no apreciaba realmente lo que allí dejé atrás, pues llevo, por trabajo, viviendo 5 años fuera de "casa", aunque voy siempre que puedo, y ya voy viviendo en unas cuantas comunidades autónomas. A veces cuando leo lo de cooficialidad del bable me dan temblores, y es que no veo mal que se estudie más, pero que lo impongan es otra cosa, porque al final pasará como en todas las autonomías en las que se ha impuesto un idioma que no todo el mundo comparte y mucho menos al cual deban someterse a algo que finalmente funciona como arma política. Finalmente hasta la propia gente nacida en esas comunidades se puede llegar a sentir desarraigado y excluido tanto para puestos de trabajo como socialmente, y esa no es la vía creo yo de conseguir nada en un mundo globalizado en el cual todos necesitamos de todos, y compartir conocimiento y trabajo es lo que nos puede hacer progresar y no hundirnos.. Un saludo.