Sí es así. Otra cosa, como tú dices, es el mal uso o no uso que se haga del castellano.Lampaul;679419]Piower, eso no es así (en mi opinión). El decreto capacita a la administración de BCN a entregar todos sus comunicados en catalán como lengua obligatoria y luego ya si quieren también en español (yo lo llamo español, lo siento).
Bueno, es tu opinión y muy respetable. Yo todavía confío en que se siga respetando la Constitución y la independencia de los estamentos. Me da igual quien gobierne, aunque me fastidia que estas cuestiones (que de fondo son de soberanía) se utilicen como contraprestación en la política nacional.Bueno, habría mucho que discutir ahí. Me parece que como es claro que el Estatuto es anticonstitucional y el TC trabaja al 100% al dictado del PSOE, la sentencia va a salir a la luz cuando el Gobierno mande y en los términos en que este diga. ¿Recordáis la bronca en público de la vicevogue a Mª Emilia Casas, presidenta del Tribunal Constitucional porque estos no se plegaban a sus espurios intereses? (porque no creo que el broncazo fuese acerca de la mejor manera de preparar el "pá amb tumaca").
Igual no es que el Estatuto sea anticonstitucional, sino que la constitución es antiestatutaria...
Hablando en plata, esto tiene que joder mucho.Un detalle: soy profesor y a veces he buscado programaciones de mi asignatura en las webs de las administraciones educativas catalanas o gallegas para compararlas con la mías, sacar información o lo que sea. Si eres profesor en un centro gallego o catalán no puedes presentar tu programación didáctica en español. Te la aceptará el centro, pero la administración te obligará a reescribirla. Tengo colegas que trabajan en esas comunidades y han tenido que pedir ayuda (o pagar a un traductor) para poder redactarlas en la lengua local. Literalmente da igual si tu programación es una mierda. Eso sí, lo importante es que sea una mierda redactada en gallego o catalán.
Peck, aunque no lo creas, estamos de acuerdo, aunque abordamos la cuestión desde distintos puntos de vista. Yo no quiero ser más nacionalista que los nacionalistas catalanes, porque eso es entrar en el mismo juego, y en igualdad de condiciones amparadas por la confrontación. Para mí es muy claro que hablar de la lengua común dentro del territorio español, es hablar del castellano, y que luego existen lenguas autonómicas reconocidas como tales. Éstas desde luego, deben tener, ya que están reconocidas, garantías de difusión. Y si esas garantías recogen la exclusión clara y evidente del castellano, entonces hacer prevalecer el derecho constitucional de la lengua común dentro del territorio nacional. Y para esto, al igual que para otras cuestiones, debería entrar de oficio la fiscalía.