La situación en Francia es muy difícil, evoluciona muy deprisa. El virus está ganando a casi todos los países occidentales por la mano. No había otra solución que confinar, y se ha tomado, como siempre, demasiado tarde. Vamos a ver que pasa en las próximas semanas, yo no las tengo todas conmigo que vaya a funcionar igual de bien con unas medidas algo más relajadas, y yendo de otoño a invierno, no hacía la primavera y el verano.