Los datos eran correctos en su momento pero la de Pfizer resultó ser algo mejor y además cumplían con la distribución, cosa que AZ no cumplió (Obviemos comercialmente la influencia del Brexit y la guerra comercial. Sí, los laboratorios farmacéuticos tienen como objetivo ganar dinero, que nadie lo dude).
La cuestión es que Ómicron está cambiando las reglas del juego. En los vacunados con dos dosis de Pfizer la protección ahora es de aproximadamente un 20% y con las dos dosis de AZ la protección es casi nula o 0%.
La tercera dosis con Pfizer hace que esas cifras de protección vuelvan a aproximadamente un 70%. En todo caso, es menos protección que con las variantes anteriores y los laboratorios ya están estudiando la posibilidad de reformular la vacuna, cosa que tardaría unos dos meses.
Es lo que tienen las vacunas de RNA mensajero. Nunca antes se habían utilizado a pesar de llevar casi 30 años de desarrollo. Tienen sus ventajas, pero también tienen inconvenientes.
Las ventajas son la facilidad de desarrollo con el nivel científico actual y la posibilidad de producciòn masiva y barata una vez desarrollada. El principal inconveniente es la escasa variedad de de los anticuerpos que generan contra el virus lo que hace que una mutación en la zona a la que va dirigido las haga totalmente inservibles.
Sin embargo este tipo de vacunas casi con seguridad serán el futuro (bueno, ya son el presente) y seguirán mejorando y evolucionando, aunque de momento no llegan a la eficacia de las tradicionales, que por otro lado son mas complicadas de desarrollar, mucho mas difíciles de producir en masa y bastante mas caras.